A pesar de su rediseño estético y mejoras tecnológicas, el nuevo Model Y no ha generado el entusiasmo esperado en ventas ni en percepción de marca.
La pantalla trasera en el Model Y 2025 busca mejorar la experiencia de los pasajeros, pero no ha sido suficiente para impulsar las ventas en mercados clave. | Foto: Ilustración
El Tesla Model Y 2025, parte del proyecto interno “Juniper”, llegó al mercado con una propuesta renovada: nuevas luces LED, mejoras interiores como una segunda pantalla trasera, y cambios en el diseño exterior que buscan modernizar el SUV más vendido de la compañía. Sin embargo, esta actualización no ha logrado el impacto esperado.
En lugar de una demanda creciente, Tesla ha recurrido a agresivas estrategias de financiamiento al 0% en mercados clave como Estados Unidos, China y Europa, una medida poco común en lanzamientos recientes de la marca.
La tibia recepción se ve reflejada en las cifras. En abril, Tesla registró una caída del 37,2% en ventas en Europa, mientras que en China —el mercado más grande de vehículos eléctricos— su participación se redujo del 12% al 7% interanual. Este contexto pone en evidencia una creciente presión competitiva, especialmente por parte de fabricantes locales como BYD, que ofrecen alternativas más económicas y tecnológicamente competitivas. A ello se suma una percepción negativa del liderazgo de Elon Musk, que ha afectado la imagen de marca en algunos sectores del público global.
Ante este panorama, Tesla ha reaccionado con ajustes en su estrategia comercial. La compañía introdujo una versión más accesible del Model Y con un precio base de $37 490, incluidos incentivos fiscales en EE. UU., y ha confirmado planes de lanzar un servicio de robotaxi autónomo desde Austin. Aun así, la pregunta persiste: ¿es esto suficiente para frenar la pérdida de cuota de mercado y reavivar el interés por su SUV estrella?
El Tesla Model Y 2025 representa un esfuerzo ambicioso por mantenerse relevante, pero su lanzamiento ha dejado en claro que los rediseños visuales ya no bastan. En un entorno de competencia feroz y consumidores más exigentes, el éxito dependerá no solo de la innovación tecnológica, sino también de una reconexión con las necesidades reales del mercado.
Tesla Model Y 2025: Motivos por el que la renovación de la SUV enfrenta una recepción fría en el mercado global